En la comunidad Camino he encontrado hermanos con las mismas inquietudes que yo, que buscan acercarse, conocer más a Dios. Muchos de ellos ya tienen larga experiencia espiritual (de quienes he podido aprender) y otros como yo vamos conociendo, creciendo, pero todos, dispuestos a dar lo mejor de sí mismos para apoyar a los demás. 

Quiero pensar que mi relación con Dios siempre ha sido muy cercana, procuro mantenerme siempre cerca de Él, que es mi TODO pero desde que estoy en la comunidad este acercamiento es más profundo, cómo que estoy más consciente, más atenta, más abierta a todo lo que escucho en la misa, en la radio católica, etc. 

No siento que haya crecido todavía espiritualmente, pero siento que estoy en camino de crecer. Creo que es poco tiempo para decir que ya crecí , pero ahí voy. 

Yo creo que todos deberíamos participar en un grupo de crecimiento espiritual, porque es la manera de permanecer conectados con la fuente de la gracia, compartir en comunidad nuestros problemas, nuestras necesidades, angustias y preocupaciones y los compañeros siempre escuchan sin juzgar, tratan de apoyar con mucho tanto, con calidez y te ayudan a reflexionar entre todos, que en todo lo que te ocurre, esta siempre la presencia de Dios.